Carlos y Cristina eligieron celebrar su boda en la preciosa finca del Torreón de Veredillas en la Oliva de Plasencia. Todo estaba predispuesto para que el día de su boda saliese todo genial, y es que no podía ser de otra manera con una pareja con tanto feeling que estuvo todo el día con una sonrisa en la cara y con ganas de disfrutar al máximo de su gran día con todos sus invitados.
Su boda fue como una montaña de emociones y es que hubo risas y lágrimas de emoción a partes iguales como veréis a continuación.
Solo nos queda daros mil gracias por todas las atenciones y el calor con el que vosotros y vuestras familias y amigos nos acogisteis.
Gracias de corazón y un abrazo enorme pareja.