Hoy os presentamos a Mario, el cual nos encandiló desde el mismo día que entro por la puerta del estudio con 20 dias de vida, porque aparte de ser un niño guapísimo, se te queda mirando fijamente con sus ojitos y te echa unas sonrisa super tiernas. Para comérselo.
La sesión de Mario tuvimos que hacerla de dos partes, ya que en la primera a Mario no le molaron nada los focos del estudio, je, je, je, Pero al día siguiente el pequeño se durmió enseguida y se dejó vestir de todo: con gorritos, con petos, disfrazado de ratoncito, etc.
Para que os hagáis una pequeña idea aquí os dejamos con algunas de las imágenes.
Pero no podemos cerrar este relato sin dar las gracias a sus papis María y Alberto por dejarnos inmortalizar los primeros días de vida de su pequeño, y sobretodo muchísimas gracias por hacernos partícipes de sus aventuras y secretos, vosotros nos entendéis, je, je, je.
¡Un abrazo enorme vecinos!